Y Fisher se vistió de Horry

Ni Kobe, ni Pau, ni Rondo, Allen y Pierce. Derek Fisher, el presidente de la Asociación de Jugadores, con 35 años y 4 anillos en su haber, se puso el traje moderno de Robert Horry. No fue el clutch-man de la noche sinó que fue más allá, anotó 4 canastas en el último cuarto -11 puntos- que valieron oro para su equipo, les pone 2 a 1 (84-91) y recuperan el factor cancha.

Además, Old Man Fisher, el base que todo el mundo sabe que no puede frenar la velocidad de Rajon Rondo, en esta serie se está encargando de defender a Ray Allen. El domingo, el alero celta superó todos los récords en triples e hirió el orgullo de Derek. Ayer, Fisher chocó contra él en todo el partido y acabó sacando pecho. En ataque hoy copa todas las portadas pero atrás dejó a Allen con 2 puntos de tiro libre y 0 de 13 en tiros de campo. Sólo habían pasado 48 horas.

Cuando Kobe Bryant empieza el partido, como ayer, anotando desde los primeros instantes, los Lakers tienen muchos números de ganar. El problema es cuando quiere hacer de salvador la noche que no le toca y se acaba tirando hasta las zapatillas (10 de 29 en tiros de campo). Su obsesión por la canasta afecta a la producción de Pau Gasol y más en un día donde sufrió de lo lindo para defender a Kevin Garnett (25 puntos) y cuando éste se fue al banquillo, reemplazado por Rasheed Wallace, en el siguiente ataque, Wallace le puso un tapón a Pau. El de Sant Boi está pagando el esfuerzo y los minutos acumulados pero Andrew Bynum, con una rodilla, está dispuesto a ayudarle. El domingo estuvo colosal con 21 puntos pero sin la ayuda de Odom. Ayer entre los dos anotaron 21 puntos y capturaron 15 rebotes.

Preocupa Ron Artest, que hizo otro partido para olvidar: 2 puntos y 3 rebotes en 23 minutos. Por parte de los Celtics, Kendrick Perkins las está viendo cuadradas en play-off.