El agridulce adiós de Mutombo

Dentro de dos meses cumplirá 43 años e iba camino de terminar su 18a temporada en la NBA hasta que chocó con Greg Oden. Pasado y futuro se encontraron frente a frente y Mutombo salió mal parado: lesión de rodilla y adiós a una larga carrera ligada al mundo del baloncesto. El que ha sido escogido 4 veces como Mejor Defensor de la temporada merece una despedida mejor. En enero de 2007 superó -con 3.289 tapones- a Abdul-Jabbar como segundo máximo taponador de la historia y ahora sólo tenía por delante a Hakeem Olajuwon, otra leyenda que dejó huella en Houston. Con 2,18 metros y 8 presencias en el Allstar, se va uno de los grandes.

Dikembe Mutombo Mpolondo Mukamba Jean-Jacques Wa Mutombo. Este es el nombre completo del que ha sido hasta esta madrugada el 55 de los Rockets. El pivot que llegó a la NBA de la mano de Denver no será recordado por su nombre interminable pero si por su paso por el mundo del baloncesto. Como su estancia en la Universidad de Georgetown, conocida por crear grandes pivots y de donde también salió el recientemente retirado Alonzo Mourning. Mutombo será recordado por sus 218 centímetros, por su enorme capacidad de intimidación en la cancha pero tambíen por su voz ronca y su ayuda a la causa africana.

En 1997 creó la Fundación Dikembe Mutombo con la misión de erradicar las enfermades infantiles que afectaban a su país natal, el Congo, pero su obra más importante fue ayudar a construir, en septiembre de 2006, un hospital en Kinshasa -en las afueras del Congo- que lleva el nombre de su madre ya fallecida, Biamba Mutombo. Dicen que es la primera instalación moderna en Kinshasa en 40 años. Y es que Dikembe viajó a Estados Unidos para estudiar medicina con la meta de volver, al cabo de unos años, para mejorar la salud y la calidad de vida de su país natal. Ahora, a los 42 años y tras 18 temporadas en la NBA, seguro que se va a dedicar en cuerpo y alma a su país sin dejar de lado su último equipo, que en el primer partido de playoff fue capaz de ganar en la pista de los Blazers.

"Tendido sobre la pista, he llorado porque sabía que era el fin del baloncesto para mí", declaró Mutombo al término del seguno partido en el Rose Garden, que acabó con victoria de los Blazers por 107 a 103 y sirvió para empatar la eliminatoria a 1.

En este video se puede ver como el Mutombo serio y feroz que salía al parqué no tenía nada que ver con el Mutombo de la calle.